viernes, 26 de abril de 2019

De mentes y memorias

estruendos acoplan el sonido
intensamente
queda la palabra

que rima en esa moda
extrañamente
queda vacía

los pájaros ya no cantan
alegremente
ni por la plaza, ni por el cielo

de uno en uno fuimos cayendo
silenciosamente
en las noches de entierro

ni el otoño ni el verano nos vieron
cautelosamente
nos fuimos olvidando

corrimos el riesgo
decisivamente
de seguir sintiendo /existiendo/

y cuando ya no quedó ni un grito
fuertemente
se volvió a escuchar otro estruendo

intentaron todo hasta matarnos
vanamente
que se olvidaron que jalamos el gatillo

perdidos e invisibles corrieron
velozmente
hacia su batalla final

cayeron cada uno de ellos
fuertemente
y desde la tierra volvimos a vencer