lunes, 20 de julio de 2015

Olvidar es recordar, es volver el tiempo atrás.

Lo ví , podría decir que nunca dejé de verlo. Podría decir que nunca lo olvidé, que recordé cada momento, cada instante que pude pasar con él, me acordé de sus encantos y cuando abrió su corazón al contarme historias de él y de sus aventuras. Lo saludé, él a mí también, sonreímos, tímidos como la primera vez.
Nos encontramos en las miradas, sin tocarnos, sin siquiera estrechar la mano pude conectarme con su alma, pude abrirme de nuevo hacia él, hacia lo mucho que fuimos y lo poco a la vez.
Recordé su mirada, tierna, sincera y serena, que me dejaba sin aliento.
Recordé su sonrisa, la cual yacía en mis labios enredándonos en un beso.
Recordé sus abrazos, los que me rodeaban en suspiros y en calma profunda.
Recordé su serenidad, su paz interior que supo relajarme en mis locuras eternas.
Pude recordarte, pude sentir tu espíritu, y no te olvidé, no pude jamás dejar de pensar que hubiera pasado si nos hubiéramos dado una oportunidad, si nos hubieramos dado la oportunidad de amar, de querernos una vez más.
¿Cómo puedo negar que aún quiero dormir en tus brazos?
¿Nos merecemos aún?
Fuiste el mejor blues.

Una carta de amor.


Todo lo que de vos quisiera
es tan poco en el fondo

porque en el fondo es todo

como un perro que pasa, una colina,
esas cosas de nada, cotidianas,
espiga y cabellera y dos terrones,
el olor de tu cuerpo,
lo que decís de cualquier cosa,
conmigo o contra mía,

todo eso es tan poco
yo lo quiero de vos porque te quiero.

Que mires más allá de mí,
que me ames con violenta prescindencia
del mañana, que el grito
de tu entrega se estrelle
en la cara de un jefe de oficina,

y que el placer que juntos inventamos
sea otro signo de la libertad.

Julio Cortázar - Salvo el crepúsculo.

domingo, 19 de julio de 2015

¿Nos vimos en el espejo?

¿Alguna vez recurriste a mirarte al espejo? ¿Viste más que las ojeras que abundan en tu rostro? ¿Pudiste ver los sueños que cristalizan tus ojos? ¿Recorriste tu alma con un suspiro? ¿Reflejaste tu ser en una mirada?
Somos lo que somos y podemos cambiarlo, podemos ser brisa y agua en un momento. No necesitamos estar bajo el efecto de cualquier sustancia para soñar y menos para poder ser lo que querramos.
Aveces me siento un ave, que vuela libre por el cielo, que se posa en los árboles y que es libre como el viento. Me siento en paz, me siento en libertad, me siento aire, me siento vida, siento que puedo ser lo que quiero en un suspiro.
¿Queremos ser realmente libres? ¿Tenemos condiciones? Somos abstractos, ¿y si realmente no existimos y somos producto de un sueño? ¿Y si tenemos otras vidas? Quizá seamos más que hombres o mujeres, quizá seamos formas sin forma exacta, cuerpos sin tallas, almas sin clasificación, sin embargo somo algo, todo lleva nuestro aura, nuetro instinto, nuestro olor y sabor. ¿Somos algo realmente? ¡SÍ! Somos vida, y la naturaleza nos ama, nos ha creado y nos da el pie para seguir creciendo, somos esa naturaleza que jamás debemos perder, respiremos todo lo que podamos, libremonos de todo lo malo, que las malas vibras vayan a otro lado ¡seamos felices!
Hagamos el amor que es lo importante, acostemonos con quién queramos, amemos al otro sin importar quien nos juzgue ni su historia, abrazemos al otro, besemos sin condiciones, amemos sin perdones, aprendramos a enseñar y enseñemos a dudar para poder criticar. No importa si los otros te juzgan por "tu diferencia" acercate que te quiero, que sos humano, que sos compañerx.
"Sos compañerx", de vida, de curso, de trabajo, de calle, de momento, de etrnidad, no importa el tiempo sos compañerx y lo que importa es estar unidx porque el amor vence el odio.
Porque la Patria es el otro.
Porque somos humanos, porque nos amamos.
Porque el amor nos hará a nosotrxs.

Los modelos del éxito.


El mundo al revés premia al revés: desprecia la honestidad, castiga el trabajo, recompensa la falta de escrúpulos y alimenta el canibalismo. Sus maestros calumnian la naturaleza: la injusticia, dicen, es la ley natural. Milton Friedman, uno de los miembros más prestigiosos del cuerpo docente, habla de «la tasa natural de desempleo». Por ley natural, comprueban Richard Herrstein y Charles Murray, los negros están en los más bajos peldaños de la escala social. Para explicar el éxito de sus negocios, John D. Rockefeller solía decir que la naturaleza recompensa a los más aptos y castiga a los inútiles; y más de un siglo después, muchos dueños del mundo siguen creyendo que Charles Darwin escribió sus libros para anunciarles la gloria.
¿Supervivencia de los más aptos? La aptitud más útil para abrirse paso y sobrevivir, el killing instinct, el instinto asesino, es virtud humana cuando sirve para que las empresas grandes hagan la digestión de las empresas chicas y para que los países fuertes devoren a los países débiles, pero es prueba de bestialidad cuando cualquier pobre tipo sin trabajo sale a buscar comida con un cuchillo en la mano. Los enfermos de la patología antisocial, locura y peligro que cada pobre contiene, se inspiran en los modelos de buena salud del éxito social. Los delincuentes de morondanga aprenden lo que saben elevando la mirada, desde abajo, hacia las cumbres; estudian el ejemplo de los triunfadores y, mal que bien, hacen lo que pueden para imitarles los méritos. Pero los «jodidos siempre estarán jodidos», como solía decir don Emilio Azcárraga, que fue amo y señor de la televisión mexicana. Las posibilidades de que un banquero que vacía un banco pueda disfrutar, en paz, del fruto de sus afanes son directamente proporcionales a las posibilidades de que un ladrón que roba un banco vaya a parar a la cárcel o al cementerio.
Cuando un delincuente mata por alguna deuda impaga, la ejecución se llama ajuste de cuentas; y se llama plan de ajuste la ejecución de un país endeudado, cuando la tecnocracia internacional decide liquidarlo. El malevaje financiero secuestra países y los cocina si no pagan el rescate: si se compara, cualquier hampón resulta más inofensivo que Drácula bajo el sol. La economía mundial es la más eficiente expresión del crimen organizado. Los organismos internacionales que controlan la moneda, el comercio y el crédito practican el terrorismo contra los países pobres, y contra los pobres de todos los países, con una frialdad profesional y una impunidad que humillan al mejor de los tirabombas.
El arte de engañar al prójimo, que los estafadores practican cazando incautos por las calles, llega a lo sublime cuando algunos políticos de éxito ejercitan su talento. En los suburbios del mundo, los jefes de estado venden los saldos y retazos de sus países, a precio de liquidación por fin de temporada, como en los suburbios de las ciudades los delincuentes venden, a precio vil, el botín de sus asaltos.
Los pistoleros que se alquilan para matar realizan, en plan minorista, la misma tarea que cumplen, en gran escala, los generales condecorados por crímenes que se elevan a la categoría de glorias militares. Los asaltantes, al acecho en las esquinas, pegan zarpazos que son la versión artesanal de los golpes de fortuna asestados por los grandes especuladores que desvalijan multitudes por computadora. Los violadores que más ferozmente violan la naturaleza y los derechos humanos, jamás van presos. Ellos tienen las llaves de las cárceles. En el mundo tal cual es, mundo al revés, los países que custodian la paz universal son los que más armas fabrican y los que más armas venden a los demás países; los bancos más prestigiosos son los que más narcodólares lavan y los que más dinero robado guardan; las industrias más exitosas son las que más envenenan el planeta; y la salvación del medio ambiente es el más brillante negocio de las empresas que lo aniquilan. Son dignos de impunidad y felicitación quienes matan la mayor cantidad de gente en el menor tiempo, quienes ganan la mayor cantidad de dinero con el menor trabajo y quienes exterminan la mayor cantidad de naturaleza al menor costo.
Caminar es un peligro y respirar es una hazaña en las grandes ciudades del mundo al revés. Quien no está preso de la necesidad, está preso del miedo: unos no duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no duermen por el pánico de perder las cosas que tienen. El mundo al revés nos entrena para ver al prójimo como una amenaza y no como una promesa, nos reduce a la soledad y nos consuela con drogas químicas y con amigos cibernéticos. Estamos condenados a morirnos de hambre, a morirnos de miedo o a morirnos de aburrimiento, si es que alguna bala perdida no nos abrevia la existencia.
¿Será esta libertad, la libertad de elegir entre esas desdichas amenazadas, nuestra única libertad posible? El mundo al revés nos enseña a padecer la realidad en lugar de cambiarla, a olvidar el pasado en lugar de escucharlo y a aceptar el futuro en lugar de imaginarlo: así practica el crimen, y así lo recomienda. En su escuela, escuela del crimen son obligatorias las clases de impotencia, amnesia y  resignación. Pero está visto que no hay desgracia sin gracia, ni cara que no tenga su contracara, ni desaliento que no busque su aliento. Ni tampoco hay escuela que no encuentre su contraescuela.
Eduardo Galeano - Patas arriba. La escuela del mundo al revés.

Seamos libres.

Seamos libres, que el pueblo persista
seamos compañeros, en la ruptura inevitable,
seamos hermanos, en la fractura familiar,
seamos amor, en el odio permanente

Seamos la equidad, ante la injusticia latente,
seamos esperanza, ante el miedo que paraliza,
seamos sueños, cuando las pesadillas abunden,
seamos corazón, cuando el temor aparezca

Combatimos con alegría esta ruina,
con anhelo de libertad y progreso
queremos a la Patria, como al cielo,
y en las manos del pueblo está el cambio.

Seamos libres, la democracia está servida,
aunque sea injusta por momentos,
es lo que tenemos, lo que debemos.
Seamos libres, que lo demás no importa.

sábado, 11 de julio de 2015

Eva Perón.

No puedo evitar hablarte Evita, te escucho en susurros, te milito en mi corazón, te deseo todos los días.
Mi amor por vos no ha de cambiar jamás, es incomprensible, como el tuyo por el pueblo argentino.
Eva; lamento si dudé de mis convicciones, disculpame si no pude llevar la patria en el pecho, soy una descamisada más, que te ama, que te espera, que te estima, que estuvo en la Plaza llorándote y esperando a que vuelvas a la lucha... A la lucha de la cual jamás te fuiste, la cual hoy, los Descamisados llevamos en pie, junto a la Patria, junto al pueblo argentino que se regociga ante tu nombre, que anhela tu regreso, que aspira tu libertad y progreso.
Eva, Evita, compañera, no te vayas nunca de mi vida, sos mi militancia, sos lo que me mueve hasta acá, sos lo que me saca de cualquier infierno, sos el paraíso del pueblo, confío en vos tanto como vos en mí.
Espero con ansias defender a la Patria en tu nombre junto al de Perón, el Justicialismo lo espera.
Eva confía en mí, voy a defender al pueblo hasta que no me den las manos ni el cuerpo. Voy a defender a Perón con el alma, por vos y por la Patria, por los Descamisados, por las mujeres y niños, por los trabajadores pero más que nada por tu pueblo.

"Si este pueblo me pidiese la vida, se la daría cantando, porque la felicidad de un sólo Descamisado vale más que mi vida entera"
 

Evita 1/2.

1935
Buenos Aires

Parece una flaquita del montón, paliducha, desteñida, ni fea ni linda, que usa ropa de segunda mano y repite sin chistar las rutinas de la pobreza. Como todas vive prendida a los novelones de la radio, los domingos va al cine y sueña con ser Norma Shearer, y todas las tardecitas, en la estación del pueblo, mira pasar el tren hacia Buenos Aires. Pero Eva Duarte está harta. Ha cumplido quince años y está harta: trepa al tren y se larga.

 Esta chiquilina no tiene nada. No tiene padre ni dinero; no es dueña de ninguna cosa. Ni siquiera tiene una memoria que la ayude. Desde que nació en el pueblo de Los Toldos, hija de madre soltera, fue condenada a la humillación, y ahora es una nadie entre los miles de nadies que los trenes vuelcan cada dí­a sobre Buenos Aires, multitud de provincianos de pelo chuzo y piel morena, obreros y sirvientas que entran en la boca de la ciudad y son por ella devorados: durante la semana Buenos Aires los mastica y los domingos escupe los pedazos.

A los pies de la gran mole arrogante, altas cumbres de cemento. Evita se paraliza. El pánico no la deja hacer otra cosa que estrujarse las manos, rojas de frío, y llorar. Después se traga las lágrimas, aprieta los dientes, agarra fuerte la valija de cartón y se hunde en la ciudad.

Alguien.

En una esquina, ante el semáforo rojo, alguien traga fuego, alguien lava parabrisas, alguien vende toallitas de papel, chicles, banderitas y muñecas que hacen pipí. Alguien escucha el horóscopo por radio, agradecido de que los astros se ocupen de él. Caminando entre los altos edificios, alguien quisiera comprar silencio o aire, pero no le alcanzan las monedas. En un cochino suburbio, entre los enjambres de moscas de arriba y los ejércitos de ratas de abajo, alguien alquila una mujer por tres minutos: en un cuartucho de burdel es violador el violado, mejor que si lo hiciera con una burra en el río. Alguien habla solo ante el teléfono, después de colgar el tubo. Alguien habla solo ante el televisor. Alguien habla solo ante la máquina tragamonedas. Alguien riega una maceta de flores de plástico. Alguien sube a un ómnibus vacío, en la madrugada, y el ómnibus sigue estando vacío.


Eduardo Galeano - Memoria del Fuego III. El siglo del viento.

Sistema.

Te corre el mundo, te aprieta el cerebro,
te exprime, te secuncia
y en esta locura
no estás despierta

Te persiguen si hablas,
te persiguen si pensas
¿cuánto más vas a soportar?
el sistema te absorverá

No podes caer, ni volver
te quiero pisar para matar
te quiero ver sufrir, así dormís
ya vas a correr, te voy atrapar

Si cojo con quien quiero
si me visto como puedo
¿qué vale más?
vivir en la villa o en Recoleta

Soy el patriarcado que te genera
este sistema tan de mierda
soy el machismo en tu cabeza
la mujer que llora violencia

Soy el miedo a la calle
las ganas del poder que me atraen
soy lo que el pueblo no conoce
soy los billetes que me componen

Tengo rechazo a la sociedad
a este sistema de mierda,
que te consume, que te atrapa
¿qué vale más?

Soy el pueblo exterminado,
el colonizador abrumado
y el pueblo que lucha
porque sino no los escuchan

A vos gay, puto, chupa pija
que no sos normal, que no,
no te gustan las minas vos
no mereces más que una piña

Sistema de mierda, no da más
¿cuál es el fin de todo esto?
que entiendas que soy diferente
y que no me importa lo que pienses

O sí, si me importa, pero no,
habla de mí, pensá en mí
pero hermano, amigo
soy libertad y vos el reprimido

viernes, 10 de julio de 2015

El alegato.

Declare su versión de los hechos –mandó el juez.


  El escribiente, las manos en el teclado, transcribió los dichos del acusado, conocido por su apodo de El Tornillo, residente en la ciudad de Melo, mayor de edad, de estado civil soltero, de profesión desocupado.
  El acusado no negó su responsabilidad en el delito que se le imputaba. Sí, él había estrangulado una gallina que no era de su propiedad. Alegó:
  –Tuve que matarla. Hacía tiempo que me chiflaba la panza vacía.
  Y concluyó:
  –Fue en defensa propia, señor juez.
Eduardo Galeano - Bocas del Tiempo.

lunes, 6 de julio de 2015

Oda a Perón.

Lo primero, querer a Perón:
Yo sé que es necesario y urgente que el Justicialismo sea conocido, entendido y querido por todos, pero nadie se hará justicialista si primero no es peronista de corazón, y para ser peronista, lo primero es querer a Perón con toda el alma.
Por esa razón necesitamos que vengan aquí  solamente los peronistas de alma; esos que siempre se sienten capaces de volver a hacer un 17 de octubre; los que consideran que es un honor tan grande de la vida dar la vida por Perón como por la Patria misma.
Aquí no necesitamos muchas inteligencias, sino muchos corazones, porque el Justicialismo se aprende más con el corazón que con la inteligencia.
Por eso también tengo fe del triunfo del Justicialismo de Perón, porque está en los corazones más que en las inteligencias... Y la prueba es que los primeros predicadores de esta doctrina han sido los trabajadores, los más humildes argentinos, los que antes de comprender al Justicialismo lo habían sentido, porque habían querido y lo quieren a Perón con toda el alma.

Palabras de Evita, compañeros. Hace mucho tiempo no escribía, desde el 18 de junio, puede sonar que fue hace semanas pero para mí son milenios si no me siento a escribir y a soltar todo lo que siento.
Hoy te toca a vos General, al que la historia quiere ocultar, al que la derecha quiso asesinar, al que la izquierda no quiere reconocer y al que pueblo pudo comprender. Vos Perón, mi General como diría nuestra compañera, nuestra mujer ¿no? Porque Evita era mujer de la libertad, era la mujer que el pueblo aclamó que supo amar, detrás de esa mujer estabas vos, sólo vos y tu doctrina acompañando a esta mujer.
Siempre que escribo lo hago en base a lo que siento, y creeme General que me costó sentirte y quererte. Me causó mucho temor descubrirte, te negué y oculté, eso es de tibios y ni Evita ni yo queremos a los tibioscerca nuestro ni ronrando nuestras mentes tras las decisiones que podamos tomar. Creéme Perón que me causa mucho dolor mirar para atrás y haberte ocultado de mi corazón, porque todos sabemos que para entender al Justicialismo hay que sentirlo, me privé de sentir, me cegué de la historia y cuando fue más fuerte que yo no resistí a quererte, no pude negarme a tu doctrina, no pude negarte General, no puedo evitar pensar en los 17 de octubre de vendrán, en cada día que espero que nombrarte en algún debate, cada vez que miro a mi alrededor, cada vez que paso por la Plaza de Mayo e imagino verte, deslumbrando a tu pueblo ¡a los Descamisados! (entre nos, hoy soy militante, hoy soy una descamisada más).
General ¿cuánto falta para que crecer? Digo, ante la historia oficial te han negado, han ocultado el bombardeo, niegan tu valor y convicción, hablan como uno más ¡y todos sabemos que no fuiste uno más!
No es fácil ser político, menos conductor. Fuiste el líder que llevó a las masas a su entendimiento, a su sentir compañero. Nos llevaste a nosotras (con la lucha previa de mujeres organizadas y autogestionadas, valga su batalla) a un renocimiento social, a que el 11 de noviembre de 1951 sea en la historia argentina la primera votación de la mujer, proclamaste derechos para los trabajadores, a nosotros, a los Descamisados nos diste un lugar en tu corazón, nos abriste las puertas de lo que iba a ser un país mejor, la industralización del país, la justicia e equidad social que comenzaba a notarse, aún así eso no quiso frenar a la derecha asquerosa que mientras el pueblo estaba contenido,ellos, bañados en dinero quisieron asesinar la esperanza del pueblo de Perón.
Somos tu pueblo, el que hoy por te sigue llorando y esperando que vuelvas con tu doctrina. Esperando que dejen de usar tu nombre, tu historia para convencer a las masas ¿o no te acordas de los 90'? No queremos volver a eso, no quiero que vuelvan a usar tu doctrina para captar al pueblo, envenenarlo y seguir haciendo sentir a la derecha que el pueblo no es más que el ganado que irá al matadero, porque no es así.
Hoy nos toca a nosotros, a la juventud salir por vos, porque lo primero que hay que hacer es quererte, y te quiero General, te quiero como quiero la justicial social, la independencia económica y la equidad. Te quiero como quiero a la política, como quiero a mis compañeros cuando veo llevar la patria al hombro, llevar la lucha en el día a día, te quiero como cuando veo a un chico de primer año preguntarme que es un Centro de Estudiantes y que aún, con sus miedos, se animan a preguntar y a debatir. Te quiero porque tu boca supo gritar rebeldía, supo hablar con el pueblo, supo entendernos Perón, te quiero porque mientras escribo te lloro, te imagino, anhelo con hacer de la patria algo mejor, sueño con lograr que el mundo se entienda a sí mismo, combatiendo lo que tengamos que combatir, enfrentando todos los obstáculos, hoy soy yo, Rocío, militante del Centro de Estudiantes del Normal 1 que lucho con el sistema decaído sin vida, lucho con la bajeza, con la inoperancia, con la fatiga, soy la que sale a las calles a buscar fundar nuevos valores, a debatir, a crear, a construir, a amar al otro, a entenderlo porque el amor vence al odio.
General, confío en vos y en tu doctrina, confío en el conductor que nos supo amar, confío en Evita y ella nos ama, ama a cada compañero que te ame porque sabe que dentro de ese corazón está la patria, sabe que mientras te defendamos, vamos a defender a la patria misma.
Perón, Coronoel, compañero, te quiero, porque no me quedan palabras para expresar el amor que uno puede sentir por esto que es la política pero mucho menos expresar el amor por vos. Vos defendiste la patria, vos nos diste el lugar, vos nos entendiste, nosotros los descamisados, millones de ellos hartos de darle un poco más de vida a este sistema que decae te llevamos todos los días en el hombro, te honramos cada mañana, te necesitamos en nuestras derrotas, a vos compañero te debo la vida, te debo mi militancia.
Evita nos ama, los descamisados te necesitamos conductor.
"Llevo en mis oídos la más maravillosa música que, para mí, es la palabra del pueblo argentino."

¡Juventud presente! ¡Perón, Perón o muerte!